Hablando en Alemania recientemente Olav Fykse Tveit, secretario general del Consejo Mundial de Iglesias (CMI), “expresó esperanzas positivas para el liderazgo del Papa Francis” e instó a trabajar con él (oikoumene.org, 7 de mayo de 2013). Tveit hizo este comentario en un foro, junto con Robert Zollitsch, presidente de la conferencia de obispos católicos en Alemania y Katajun Amirpur, profesor de estudios islámicos en la Universidad de Hamburgo.
Cuando se le preguntó acerca de la situación actual del ecumenismo en todo el mundo, dijo Tveit, “El ecumenismo es vivir juntos en este mundo en el ámbito local, nacional e internacional. Como cristianos tenemos el objetivo común de estar unidos. Nuestra unidad es una señal de Dios de unir a todos los seres humanos.”
Vemos, pues, que el objetivo último de la iglesia mundial es la unidad de toda la humanidad. No es de extrañar que la Biblia llama el misterio de Babilonia, ya que es el mismo espíritu que el de la antigua Babel, y, finalmente, será dirigido por el máximo Nimrod, el anticristo.
Fuente: wayoflife.org, traducción: masNobles.net