La llamada Biblia del Oso, que fuera presentada por primera vez un 26 de septiembre de 1569, fue el móvil de la celebración que tuvo lugar en Cuba por su 437º aniversario.
Un acto organizado por la Comisión BÃblica del Consejo de Iglesias de Cuba (CIC), rindió homenaje a esa traducción de la Biblia al idioma español que fuera llevada a cabo por Casiodoro de Reina siglos atrás.
Se encontraban presentes la pastora licenciada Rhode González Zorrilla, presidenta de ese organismo ecuménico y el reverendo José López, secretario de su Comisión BÃblica; asà como el licenciado Antonio Mendoza, consultor de programas del Centro Regional de Sociedades BÃblicas Unidas (SBU).
Durante la celebración, López mostró un ejemplar fascÃmil del original de la Biblia de Casiodoro de Reina de 1569, donado por José Luis Andavert de la Sociedad BÃblica de España.
En Cuba la Obra BÃblica comenzó su énfasis en el último cuarto del Siglo XIX, aunque los sacerdotes que acompañaron el proceso de colonización la traÃan consigo para las enseñanzas en iglesias, escuelas y universidades fundadas por ellos. Pero fue con la llegada de colportores bÃblicos desde Estados Unidos, a partir de 1880, que comenzó un trabajo bÃblico permanente Cuba.
La Comisión BÃblica del CIC comenzó a gestarse en el año 1978 y se organiza, de manera oficial, en 1983, conformada por representantes de iglesias miembros y no de ese organismo quienes se reúnen, de manera regular, para discutir asuntos concernientes al sagrado libro y establecer estrategias de distribución.
Desde entonces son millonarias las cifras de ejemplares importadas a la Isla, junto a otros materiales sobre esa temática, gracias al trabajo coordinado con el Centro Regional de Sociedades BÃblicas Unidas (SBU), y otros organismos internacionales tales como ministerios bÃblicos y de literatura cristiana de diversas latitudes. Mientras una imprenta funciona en la Iglesia Presbiteriana Reformada de Matanzas, con máquinas donadas por SBU.
Se afirma que las grandes figuras de la lucha por la independencia de Cuba fueron apasionados lectores y estudiosos de la Biblia, entre los que se citan a José Martà y a José de la Luz y Caballero.
Fuente: ALC/ACPress.net