Unos 200 católicos, cuatro de ellos con rifles y los demás con machete, se reunieron en la mañana del lunes, para pedirle a los líderes de Iglesia Renovación en Cristo, que firmaran un documento donde aceptaban renunciar a su creencia y a desterrarse del ejido Gabriel Leyva Velázquez, del municipio Las Margaritas, pero no lo hicieron.
Molestos entonces los católicos, procedieron a bloquear la carretera que conduce a la cabecera municipal, mientras que otros se apostaron en la periferia del pueblo, con el fin de cerrarle el paso a los evangélicos, éstos que aprovecharon un descuido para huir del lugar.
Los caciques católicos sostuvieron contar con la anuncia del alcalde José Domingo Vázquez López, para echarlos de la comunidad, tirar sus casas y la iglesia de la congregación, ésta que fue edificada hace cinco años.
Cuando los católicos empezaron a derribar las casas, uno de los evangélicos consiguió sacar las biblias, pero no pudo salvar otros objetos, ya que las paredes que caían aplastaban los instrumentos musicales, las sillas, el estrado y otros enseres.
Mientras tanto, varios grupos de católicos tiraban las casas de los evangélicos y destruía aparatos eléctricos, molinos para moler granos, trastos y semillas. Los animales de corral que se encontraban en los traspatios, se diseminaron por el pueblo.
Los 30 hombres, mujeres y niños de la etnia tojolabal, entonces, se adentraron hacia la montaña, para evitar morir macheteados o baleados por los católicos. Los niños no dejaban de llorar por el miedo, el frío y la falta de alimento, narra Caralampio Jiménez Jiménez, líder de la congregación.
El hombre de 30 años de edad, explica que desde hace varios meses, los católicos pidieron que renunciaran a la Iglesia Renovación en Cristo y ante la presión que ejercieron 11 familias decidieron regresar a la Iglesia católica y solo 7 permanecieron en la fe.
Caralampio sostiene: “Nosotros no queremos negar nuestra fe con el Señor, porque es bueno seguir a Dios. No hay otro Dios tan misericordioso que él. Nuestro Señor Jesucristo es el abogado. El nos va ayudar, por eso nosotros no queremos negar nuestra fe con Dios”.
En la madrugada fría del martes, las 7 familias, que hacen un total de 30 personas, llegaron a la cabecera municipal, para buscar protección de las autoridades. El ayuntamiento les proporcionó un espacio en el Auditorio de basquetbol, así como alimentos y cobijas.
Por la noche, los líderes de la Iglesia interpusieron demanda en la Subprocuraduría de Justicia Indígena, en contra de los líderes católicos.
Fuente: https://www.chiapasparalelo.com/noticias/chiapas/2016/01/evangelicos-expulsados-aseguran-se-mantendran-en-la-fe/